Aranjuez, paraíso terrenal

Aranjuez, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 2001 es un lugar donde la naturaleza y la historia se fusionan de manera única. Sus jardines, diseñados con un exquisito gusto estético, son auténticos museos vegetales que invitan a pasear y relajarse. El Palacio Real, joya de la arquitectura del siglo XVIII, y otros edificios históricos como la Casa del Labrador, conforman un conjunto monumental de gran belleza. La abundancia de agua, gracias a los ríos Tajo y Jarama, ha permitido desarrollar un sistema de riego que ha modelado el paisaje y ha favorecido la agricultura.

Un legado histórico

Desde el siglo XV, Aranjuez ha sido un lugar de recreo para la realeza española. Los reyes de la Casa de Austria y de Borbón dejaron su huella en esta villa, embelleciéndola con palacios, jardines y obras de arte. Durante los siglos XVIII y XIX, Aranjuez vivió su época dorada como residencia de verano de la corte. Hoy en día, este legado histórico se puede apreciar en cada rincón de la ciudad. Además de su patrimonio cultural, Aranjuez ofrece una gastronomía de alta calidad, basada en productos frescos de la huerta y elaborada con recetas tradicionales con platos exquisitamente cocinados en los restaurantes locales, uno de ellos con estrella Michelin.